lunes, 1 de mayo de 2017

CÓMO DETENER EL HIPO CON SÓLO SUS PENSAMIENTOS!!!

De acuerdo con un estudio de cinco años de la Asociación Americana de Colegios de Medicina Osteopática, dirigido por el Dr. Tyler Cymet, nada más que el tiempo detiene el hipo. El Dr. Cymet básicamente descubrió que nada necesariamente ayudaba a que el hipo se detuviera y la única constante en su experimento fue que el hipo terminó por su cuenta.

Sin embargo, había un psicólogo con el nombre de Duane Hurst que logró curar el hipo crónico de un paciente a través de la variabilidad de la frecuencia cardíaca Biofeedback, que mide su ritmo cardíaco e instruye al paciente a alcanzar un estado de “descanso y digerir” a través de la respiración profunda. Esta es la razón por la mantequilla de maní es reverenciado como una “cura de hipo”. Cuando su boca está cerrada, usted termina respirando profundamente a través de su nariz, causando un instante “descanso y digerir” estado en su cuerpo. Puede que este tipo no esté demasiado lejos …

¿Qué causa el hipo en el primer lugar?

Los hipo pueden ocurrir por muchas razones diferentes. Cualquier cosa de comer demasiado rápidamente, a la goma de mascar, a un cambio repentino en temperatura puede hacer su diafragma endurecer para arriba. Su diafragma se contraerá, lo que hará que respirar aire muy rápidamente, lo que hace que su glottis (la apertura entre sus acordes vocales) cerca. Esta acción es la razón detrás de ese lindo sonido de hipo que todos conocemos y amamos. Así que este tipo fue básicamente sugiriendo que todo este proceso puede ser detenido sólo por pensar en ello.

Mi experiencia y cómo hacerlo

Yo, por supuesto, al instante se animó y continuó escuchando. Él me dijo que enviara pensamientos tranquilizadores a mi diafragma – el músculo justo debajo de sus pulmones, responsable de la inhalación y la inspiración. También es justo en el área de su plexo solar (para todos los yoguis que hay por ahí). Dijo que se concentrara en ese músculo y que se tranquilizara. Cerré los ojos y lo probé. Y funcionó.
No más de 10 segundos más tarde, abrí los ojos, y bajo y he aquí – no más hipo. Se rió y dijo, “muy buen truco de fiesta”, y luego se alejó. Yo estaba piso! Siempre supe que nuestras mentes eran poderosas, pero ahora tenía pruebas reales.

Pruebe este truco la próxima vez que tenga un ataque de hipo. Si podemos detener el hipo con pensamiento solo, solo piensa en qué más podemos hacer con el poder de nuestras mentes.

Háganos saber cómo funcionó y qué otros trucos que utiliza!


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